Inseguridad y violencia sin fin en Cartagena de Indias
No puedo evitar hacerme eco de esta noticia que muestra como el que es presuntamente un destino habitual en los turistas que -cometen el error de- visitar Colombia que es visitar Cartagena de Indias es uno de los lugares más inquietantemente peligrosos del país y donde para un turista es demasiado fácil ser asesinado
Personalmente podría decir que no es asunto mío, pues yo , al estar amenazado de muerte por mi familia política, a la que yo llamo "el cártel de los Duran Peña", jamás pisaré ese país, al que considero el país de los asesinos -impunes- de mi esposa donde ésta fue maltratada hasta la muerte
Quiero aclarar que aunque jamás pisaré ese país sin una escolta armada, quiero creer, como sin duda creería mi esposa, que la inmensa mayoría de colombianos son personas decentes y honestas, que no tienen nada que ver con mi familia política y su completa ausencia de criterios morales y decencia, y por eso me parece lamentable su evidente degradación que soluciones populistas dificilmente solucionarán
Pero aún así entiendo que es estremecedora la cifra de crímenes y violencia en esa ciudad, muchos de los cuales cometidos contra turistas inocentes que artificialmente seducidos por un paisaje presuntamente idílico son robados, asesinados o apaleados sólo para que empresarios hoteleros sin demasiados escrúpulos morales puedan engordar su cuenta de beneficios
Este era el inquietante panorama de violencia y asesinatos en la Colombia de la pandemia, que la convertía en un lugar peligroso,no sólo para el turismo sino para la inversión e incluso para sobrevivir para sus ciudadanos de bien, que insisto estoy convencido que son mayoría en el país -aunque yo nunca lo vaya a poder comprobar-
"Los 35 homicidios registrados en enero de este 2022 no eran un buen presagio de lo que se venía para el resto del año. De hecho, ese mes resultó ser uno de los más violentos en la ciudad en mucho tiempo.
A estos asesinatos les siguieron 24 más durante febrero, 31 en marzo y 18 en lo corrido de abril. Todas estas cifras superan lo reportado en 2021, pues en enero del año pasado hubo 23 homicidios, en febrero 15, en marzo 19 y en abril 10.
Lo que permite intuir una conclusión inequívoca: Los empresarios turísticos con hoteles en Cartagena de Indias se podrían considerar coresponsables de las muertes de sus clientes al atraerles a un destino tan inequívocamente peligroso como éste , y todo ello por dinero
Uno de ellos es mi propio hijastro, Juan Pablo Durán Peña, al que tengo denunciado por la muerte de su madre, mi esposa, Susana Peña Fandiño en agosto 19 y su nuera Mitzy Martínez
Para ver la magnitud de las cifras de esa violencia en Cartagena compararla con Barcelona:
Cartagena tiene oficialmente 915.000 habitantes. El promedio anual de asesinatos es de 324 en este año 2022
En Barcelona, con una población de 1.600.000 habitantes el último promedio oficial de crímenes es de 32 , es decir diez veces menos que en Cartagena
En Cartagena la tasa de crímenes por cada 100.000 habitantes es de 35 anuales
En Barcelona, la tasa de crímenes por cada 100.000 habitantes es de 2, 17 veces menos que en Cartagena
Esa es la ciudad en la que escogió vivir mi hijastro Juan Pablo Durán sólo para alejarse de una madre a la que despreciaba y desde 2015 para casarse por dinero y ser un mantenido en la ciudad.
Su madre se sentiría sólo por eso avergonzada de él
Espero que mi hijastro disfrute de ese paraíso de criminalidad que es su ciudad cartagenera a cambio de ser un mantenido en ella.
Aunque friamente diría que cada cual está donde están aquellos de su misma condición moral y humana. Es decir, él está en el sumidero humano que merece. En todos los sentidos.
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