jueves, 30 de abril de 2020

Sigamos hablando de dinero

Para mostrar claramente la opinión y la consideración moral que me merecen no sólo los hijos de Susana sino el resto de su familia, deseo mostrar no con opiniones sino con cifras demostrables documentalmente cual fue el verdadero apoyo que tuvo Susana durante su enfermedad.

He investigado meticulosamente durante este año a miembros de esta familia y por ejemplo he conseguido extractos bancarios del hijo, Juan Pablo Durán Peña (foto izqda) del primer cuatrimestre de 2016 que me sirven para ilustrar mi opinión sobre ellos

En este primer cuatrimestre, enero-abril de 2016, Juan Pablo Durán ingresó a su madre la cantidad de 730 euros.

Esta cifra es notablemente inferior a la que Susana me comunicó que habia recibido de él, sin demostrármelo, que ascendía a 2100 euros, y que yo sospechaba que era una cantidad exagerada como demuestra este extracto.

Lo que Susana con toda seguridad no sabía es que la ex esposa Sara Jurado Suner le pagó a Juan Pablo Durán la cantidad de 800 euros. Ignoro el motivo pero creo que la hipótesis más sensata es la que Susana me comentó hace cuatro años cuando apareció el libro De Cara al Viento I parte y es que Sara seguía en contacto con su ex marido con toda normalidad , le ayudó a Susana en las primeras semanas de 2015 y  posiblemente decidiera realizar algún tipo de ayuda económica a Susana, a través de su hijo, que finalmente éste optó por quedarse.

No olvido que en el libro De Cara Al Viento, I parte, Susana destacó explícitamente lo bien que se comportó con ella Sara Jurado, su ex nuera, pero que no se atrevíó a publicarlo en el libro ya que, como Susana me comentó, si "Michi", la actual esposa de su hijo se enterase que siguen en contacto ,ésta, grotescamente celosa, "le mataría sin dudarlo". Personalmente yo no veo motivo para ocultar ese dato más bien al contrario

Quedan en este extracto por aclarar los 820 euros en dos ingresos sucesivos. Personalmente no descarto que este dinero se lo hubiese sacado a la esposa a cuenta de una ayuda para su madre que finalmente él se embolsaría también

Durante este período yo ayudé económicamente a Susana con 3.295 euros

Sea como sea el balance económico de este cuatrimestre en relación a Susana fue:

Por cada  euro que el hijo ingresó para ayudar a su madre, yo le aporté 4,65

En este período la ayuda de la hija fue CERO euros

En este período la ayuda de su  familia fue CERO euros

Sus amigas de Marymount le aportaron nos 625 euros (85% de lo aportado por el hijo)

La conducta de la hija durante este período (y no sólo durante él), vulneró el artículo 229 del código penal colombiano que establece textualmente

"El que se sustraiga sin justa causa a la prestación de alimentos legalmente debidos a sus ascendientes, descendientes, adoptante, adoptivo, cónyuge o compañero o compañera permanente, incurrirá en prisión de dieciséis (16) a cincuenta y cuatro (54) meses y multa de trece punto treinta y tres (13.33) a treinta (30) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

La pena será de prisión de treinta y dos (32) a setenta y dos (72) meses y multa de veinte (20) a treinta y siete punto cinco (37.5) salarios mínimos legales mensuales vigentes cuando la inasistencia alimentaria se cometa contra un menor."

Aparte de vulnerar el código civil en sus artículos 411,412 y 413 y 251-252

Es difícil establecer en esta conducta factores indiciarios de delito en los familiares, que sabiendo la situación absolutamente precaria de Susana también se desentendieron de ella, lo que no les impidió lloriquear histérica e hipócritamente la muerte de Susana en agosto 19 simulando lamentarla

La situación de Susana queda económicamente tan precaria que debe proceder a malvender el apartamento de Pals, lo que le costó un grandisimo disgusto, mayor si cabe por el hecho de que esa pérdida tan dolorosa se producía por la negativa de los hijos y su familia a ayudarla

Cuando se produce esta venta, mayo 16, ambos hijos se niegan a dirigirle la palabra, por lo que de alguna manera Susana acaba recomprando su afecto, entregándoles buena parte de los ingresos de esta venta, lo cual a mí me parecía surrealista y profundamente indecente

En una conversación a finales de abril, poco después de que el hijo, instigado por la nuera de Susana que la odiaba profundamente le comunica que se niega a volver a ayudarla (lo que causó la primera verbalización por parte de ella de un posible intento de suicidio por barbitúricos, 26-4-16), Susana decide entregarle buena parte del dinero de las arras recibidas, y que ella necesitaba para poder sobrevivir.  Algo que a los hijos y al resto de la familia les resultaba completamente indiferente.

En conversación telefónica que yo pude escuchar, el hijo le comunicó que si bien NO necesitaba ese dinero si lo quería para que su esposa y su suegra "le mirasen con mejores ojos" y no como a lo que era, un muerto de hambre que vive de su esposa. Quiso por tanto arruinar a su propia madre por una mera cuestión de snobismo social

Y Susana accedió

Pocas semanas después realiza otro de sus absurdos viajes a Colombia, pagado por ella, como otros tres de los que realizó y que el hijo pretendió falsamente haber pagado él, y que estaban aparentemente planificados con la única intención por parte de sus hijos de desgastarle la salud y acelerarle la muerte, y regresa profundamente deprimida, diciéndome "mis hijos me han sacado todo el dinero que han querido"... Ambos se negaron a volver a ayudarla en ningún caso hasta navidad de 2017 con dos ayudas simbólicas en forma de compras del supermercado que en ningún caso pasaron de 400 euros

Si contabilizo el dinero que le quedó a Susana de la venta del piso y le resto el que realmente logró conservar de la codicia de sus hijos, a éstos les entregó unos 10.000 euros

Contabilizando el balance económico del segundo cuatrimestre de 2016, éste indica

Yo aporté en este período 3.475 euros

El hijo CERO euros

La hija CERO euros

Ambos hijos recibieron de su madre saqueándole su patrimonio 10.000 euros

El resto de la familia ayudó a Susana con CERO euros

Esto significa que por cada euro que yo aporté sin obligación alguna para el mantenimiento de Susana, para que no muriese de hambre, sus hijos le cobraron a ella (haciendo negocio con su enfermedad), 2,87 euros


Aquí yo quedo absolutamente desconcertado al no ver ninguna lógica en el hecho de estar ayudando a Susana para que ésta ayude (en cierto modo con mi dinero) a sus hijos y satisfacer así su ilimitada codicia propia de verdaderas aves carroñeras


Cual fue la conclusión de la familia ante estos hechos objetivos y demostrables documentalmente?

Indicarme el 29 de agosto de 2019 que me consideraban un criminal, que me odiaban profundamente y que deseaban que yo acabase en una "prisión colombiana", palabras pronunciadas por una de las hermanas, que también lloriqueó de lo lindo su muerte pero se le olvidó decir que durante la enfermedad sólo se preocupó de Susana para insultarla gravemente en una ocasión, junio 15 y desentenderse completamente de ella hasta junio 19, acumulando, dicho sea de paso, hasta 18 antecedentes penales en Estados Unidos.

Esta hermana, ruin y malvada,  añadió ese día que si yo me acercaba a la casa de la mala hija (y delincuente) para estar con mi esposa en sus momentos finales, habían "dispuesto guardias armados con órdenes de pararme como fuese", es decir sicarios para matarme a tiros.

Este era el premio por salvar la vida de Susana durante cuatro años y medio

Ni las peores bestias se habrían comportado así

Estoy absolutamente convencido que ni la familia de Pablo Escobar o cualquier gangster colombiano se habría comportado con esta vileza moral conmigo y con Susana de la que tuvieron esos dos delincuentes que Susana tenía por hijos

Insisto una vez más, esta familia tan corrompida, moral y humanamente, de mí, que no espere ni olvido ni perdón

miércoles, 29 de abril de 2020

Hablemos de dinero

Una de las muchas razones por las que me afectó la muerte de Susana es porque ya no pudo ser posible hacer algo en lo que yo llevaba insistiendo tres años, y es celebrar una ceremonia de verdad, y no una pantomima que fue lo que se realizó en Andorra en octubre 2016

Tal y como escribí entonces, aquella ceremonia no tuvo para mi ninguna validez emocional, por el hecho de habérseme impuesto en ella a dos delincuentes, hijo y nuera de Susana  como padrinos, -invitados aparte,  como el falso amigo, el habilitado, no era en absoluto bienvenido por mi parte- por la escasisima confianza que su honradez me merecía

Personalmente me causaba una absoluta vergüenza que se me relacionase con esta clase de gentuza y por ello no quise que mi familia se mezclase con sujetos de esta catadura moral.

 Me refiero evidentemente al hijo, Juan Pablo, a quien yo puedo calificar objetivamente como proxeneta (por su empresa con CIF nº CIF B65757064, ) cuyos gastos de liquidación los tuve que pagar yo: y cuya financiación se la sacó a su propia madre como ella me indicó con gran tristeza 

y que hoy puedo calificar explícitamente además como estafador, por los 16.000 euros por él solicitados a nombre de su madre, quedándose el dinero y endosándole la deuda, como Susana recordaba con absoluta y meridiana precisión en junio 19 (Y que generó un juicio contra ella por ese valor nº165/2019-L) ,

 y a quien hoy responsabilizo por la muerte de mi esposa, su propia madre; y además a su lamentable esposa, una penosa y grosera cartagenera con graves problemas con el alcohol y la falta de educación y que me indicó explícitamente  en aquel viaje cuya estancia fue a cuenta mía, (como buenos caraduras que ambos son)  la envergadura del desprecio que sentía por su suegra la misma víspera de aquella ceremonia en Andorra. Por si no fuese bastanye, dos años después  se llevó de mi domicilio las joyas de mi madre (junio 18), un lamentable y delictivo suceso que tuve que callar para no alterar más a Susana en su estado de salud, aunque sé que a ella no la hubiera sorprendido, pues ya en 2015 desaparecieron efectos personales de su casa que aparecieron en la de su nuera, como Susana comprobó en el siguiente absurdo viaje a Colombia

A todos ellos los he investigado meticulosamente y por ejemplo ahora puedo indicar mi convicción que su hijo, despreciaba tanto como su hermana a su madre, a quien veía sólo como una marioneta a quien sacarle todo el dinero posible, o incluso como una excusa perfecta para sacarle dinero a su esposa de cuyo dinero vive.

En el falso funeral que montaron en Bogotá, el hijo, atropelladamente pretendió haber estado manteniendo él y sólo él a Susana todos esos años. Eso era una espectacular mentira fácilmente desmontable, como se puede ver con este extracto bancario del primer trimestre de 2016 de la cuenta del hijo:

En este extracto se pueden ver datos muy interesantes:

Pagó 730 euros en un único ingreso de  concepto (Alquiler MOM) , algo discutible teniendo en cuenta que ese alquiler lo pagábamos directamente ambos en ingreso bancario y que costó ese trimestre 2.100 euros. Según me decía Susana su hijo le hacía un ingreso mensual para cubrir ese gasto. La realidad es que esos ingresos eran ya en ese trimestre mucho más espaciados de los que Susana reconocía y de menor importe... procediendo a desaparecer completamente desde abril 16, cuando le comunicó a su madre que se negaba a volver a ayudarla lo que precipitó (26/4/16) que Susana verbalizase por vez primera su intención de suicidarse con una sobredosis de pastillas por ello

Debo decir que sólo en ese trimestre, yo ayudé económicamente a Susana por valor de  1050 euros para pagar el alquiler y de unos 1.600 adicionales para su mantenimiento, un total de 3,5 veces más dinero del que le ingresó su hijo (la hija no ingresó nada) -en ese momento ni siquiera estábamos casados-. Creo recordar que en esas fechas incluso sus propias amigas del Marymount la ayudaron económicamente por un importe mayor que el de sus `propios hijos.

Y dicho sea de paso, el resto de familia, como de costumbre, de perfil. El resto de familia que tan furiosamente lloriqueó su muerte en agosto 19, simulando sentirla

 Si Susana hubiera debido alimentarse o pagar el alquiler en ese primer trimestre de 2016 con las ayudas del hijo, habría tenido para comer 30 euros para los tres meses y sólo habría podido pagar uno de los dos recibos de alquiler. Esto lo digo para dejar claro que las  minúsculas ayudas económicas del hijo eran mucho más simbólicas que reales, aún reconociendo que eran notablemente superiores a las de la hija, que en este trimestre, como en todos los que van de febrero 15 a agosto 19, fueron CERO euros. Este hecho en sí mismo supone para ambos la evidencia de que vulneraron el artículo 229 del Código Penal colombiano

Obviamente no puedo entrar en el hecho de si realmente el dinero que le sacó a la esposa para ayudar supuestamente a su madre fue sólo de esta cantidad o hubo cantidades superiores que fueron directamente a su bolsillo, como sospecho. Así por ejemplo, recibió ingresos por valor de otros 820 euros de origen desconocido, -¿quizá de su esposa?-  y de otros 800 de su ex esposa, Sara Jurado Suner.

Porqué pagaba Sara a su ex  esposo esta cantidad? Susana me indicó en 2016 que ambos seguían en contacto pese a lo cual tuvo que esconder ese dato en el libro De Cara al Viento, poniéndole un nombre ficticio como de  una supuesta "amiga de la familia" que acompañó a su hijo durante los primeros días de 2015, dado que si no lo hacía así la esposa, enfermizamente celosa, "lo mataría sin dudarlo" ,  pero también, como se ve en este extracto seguían en contacto en 2016 (y me consta que como mínimo también en 2017) .

Susana me indicó que Sara se había portado muy bien con ella en este periodo. La hipótesis de que le hubiera manifestado a su hijo su intención de ayudarla económicamente, creo que no es disparatada, como no lo es que el hijo se quedase ese dinero

Por lo que puede verse, el hijo pagó cantidades a su madre muy inferiores de las que a mi Susana me reconoció, algo típico en ella, siempre dispuesta a blanquear las acciones de sus hijos , y vreo es muy posible que le sacase cantidades iguales o superiores al importe de esas ayudas a su esposa , pero también a su propia ex esposa, haciendo por tanto negocio con todas a la vez.

La enfermedad de Susana fue por tanto  un negocio productivo y redondo para su hijo como lo fue para su hija, que vulnerando el código penal colombiano se negó sistemáticamente a dar el menor apoyo a su madre enferma, un apoyo que tuve que dar yo, y por lo que se me quiso premiar el 29 de agosto de 2019 con "guardias armados" dispuestos a matarme a tiros en la calle en Bogotá como venganza por haber salvado la vida de Susana, y en parte para acallar esto que estoy contando,

Así funciona esa amoral familia que no tendrá jamás ni mi olvido ni mi perdón