miércoles, 1 de julio de 2020

Maria Carolina Duran, demonio encarnado cumple 43


Pues si, el demonio encarnado Maria Carolina Durán cumple 43.

Espero y deseo que éste sea tu último cumpleaños, malvada. Espero que todos los esfuerzos que estoy haciendo para destruir tu carrera política, infame e indigna se salden positivamente con tu fracaso-


Me parece de una vileza  moral inaudita que te atrevas a apropiarte del nombre de tu madre, a la que tanto odiabas y a la que llevaste explícita y deliberadamente a la muerte para decir sin pestañear que ella te recuerda "desde el otro plano" que debes creer en tí, confiar en Dios y en la vida, y que sí se puede.


Tu empujaste a tu madre a la muerte. 

Te desentendiste de ella durante los cuatro años y medio de su enfermedad por el odio tenaz que le tenías desde siempre. 


"Le dijo, fríamente, sin titubear ni un milímetro que ya no entendía porqué seguía agarrándose a la vida. Porqué no se dejaba morir de una vez y abandonaba definitivamente todo esfuerzo por ponerse bien. Recalcó que hablaba en su nombre y en el de su hermano (yo lo creo) cuando afirmó que a ellos ya no les hacía ninguna falta, y que podía morirse en cualquier momento, que ellos pasarían muy bien sin ella. Que abandonase todos los tratamientos y se dejase morir para descansar en paz. Todo ello, no en un contexto de exabrupto puntual, sino de una expresión fría y calculada de desprecio y desdén hacia su madre

Susana, al parecer, pálida,y casi temblando le preguntó: Entonces, me estás pidiendo que me suicide? Lo cual era exactamente lo que Maria Carolina quería que hiciese.No hubo respuesta. No hacía falta

Maria Carolina sabía muy bien que este mensaje venenoso no podía hacerlo delante de mí. Si lo hubiese hecho, como mínimo le habría roto una silla en la cabeza, y ahora, lamento no haberlo hecho"

Recuerdas ese día demonio encarnado?

Fue el 16 de diciembre de 2018. Dos días después te fugaste -tipico en ti- sin pagar el piso turístico en el que te ocultaste esos días, dejando una deuda de 1500 euros. 

Maria Carolina Duran,  experta en fugarse cobarde y ruin mente de Barcelona 

Yo aún hoy conservo en mis oidos el extremo dolor que sufrió tu madre en los días posteriores a esta canallada tuya, cuando se pasó una semana en la cama, llorando amargamente y diciendo una y otra vez:

"Porqué me odia tanto mi hija? Que le hecho yo para que me odie así"

Una y otra vez y sin que yo pudiera hacer nada.

Sólo por ese dolor que le causaste, canalla, si algún día te pongo las manos encima, te juro que te arrancaré tu cabeza de bestia inmunda colombiana. Mereces la muerte y todo lo malo que la vida te pueda traer

Aún recuerdo cuando esos días llegó a verbalizar su intención de suicidarse por el odio que le habías demostrado, asquerosa canalla.

Tuve que pasar días vigilando que no tomase una sobredosis de barbitúricos por creer que debido al odio que le  demostraste ya no tenía ganas de vivir.

A partir de aquí, ella te hizo escrupuloso caso. EMpezó a descuidar los tratamientos y finalmente a no asistir a ellos. 

Como tu querías. 

Eso le causó la inflamación craneoencefálica que aceleró su deterioro físico


Dos meses después, la llamaste poco antes de entrar en la consulta de la oncóloga,  y le pediste a tu madre que solicitase un medicamento para que le hiciesen la eutanasia ese mismo día. Susana estuvo a punto de caer redonda al suelo ante semejante muestra de odio por tu parte. Te hizo repetir esas palabras para que yo las escuchase. Quedé atónito ante la envergadura del odio que le tenías.

En julio nos ofrecieron un tratamiento experimental que debía confirmar la posibilidad de que la previsible inflamación craneoencefálica fuese sólo eso, inflamación y no tumor, como sospechaba la oncóloga del Clínic y su colega del ICC del Hospital Duran Reinals, realizándo una resonancia positrónica que habría podido confirmar que esa inflamación era en realidad estrictamente eso y no tumor. No sirvió de nada. Susana, deprimida por el odio que le demostraron sus hijos no tuvo interés en hacerse esa prueba ni hacer ese tratamiento. Como me dijo una enfermera del Clínic, desde enero, "había bajado los brazos ante la enfermedad". Se dejaba morir, por el odio que sus hijos y especialmente su hija le demostraba.

Tu mataste a tu madre. 

No puedo decirlo más claramente.

Tu y tu monigote hermano, un patético parásito vocacional que nunca ha hecho otra cosa en la vida que vivir de las mujeres a las que ha chuleado. 

No tengo duda ninguna que con hijos que le hubieran mostrado algo parecido a afecto, Susana habría superado la enfermedad. Pero los dos la odiábais

"Porqué me odia tanto mi hija?
Que le hecho yo para que me odie así..."

Oigo esas palabras, esa desesperación como si las estuviese pronunciando hoy mismo

Y te atreves a decir que tu mamá "te guía" desde el otro lado y te dice que debes confiar en ti y en tu dios, si es que los parricidas tenéis eso.

No bruja. 

Tu mamá sigue diciendo,. una y otra vez:

"Porqué me odia tanto mi hija... Que le hecho para que me odie así".

Una y otra vez

Con hijos malvados como vosotros, verdaderos parricidas -y lo digo basándome estrictamente en la documentación médica -, Susana estaba irremediablemente condenada a muerte

Esa es la verdad y me importa muy poco que os guste  o no.

Canallas

Enhorabuena Jorgito Durán.

Esta también es tu obra. Haber criado a dos idiotas morales absolutos como éstos  gracias a tu completa y total indolencia moral

Enhorabuena

Si existe un infierno, en él habrá un lugar para vosotros



Si quieres saber lo que pensaba tu mamá de ti, no hay más que ver los documentos que dejó en mi poder y que yo no dejaré de usar para definirte como una mala hija, una mala madre y una persona horrible



Barcelona, Julio 22, 2017

Ayer se murió la mamá de Cynthia. Estamos muchas impactadas. Tras una seria enfermedad,se levantó estupenda, y por lo que sé, por un "resfriadito", que seguramente la cogió débil, murió

Me acosté tarde e inquieta, Me he levantado a revisar mensajes para poder mandar unas flores.

La familia OValle recibe muchas reservas (?) , perdón, condolencias , todas preciosas, , pero me llaman más la atención, las muchas que mencionan la tranquilidad que debe darle a Cynthia haber sido tan buena y cariñosa con ella .

Necesariamente me hizo pensar en tí, mi hija, Maria Carolina. La relación que tienes conmigo es durísima. Me has negado techo y comida. La última vez en Bogotá, estuve sólo dos días , y salí corriendo del frío y del miedo a tener algún dolor por mi enfermedad y saberme sola en el Bed and Breakfast
También en 2015 me sacaste de tu apartamento , a las 11,30 de la noche. Pasé mi última noche en un hotel . SIn mis cosas y con frío

En diciembre de 2016 esperé mi turno para compartir la Navidad, y no pusiste casi nada de tu parte . El 24, con esfuerzo , los conseguí sentar a todos en la mesa, a contar las horas, poquitas . Se fueron al amanecer del 25 , y ahí plantada  me quedé yo .

El agravio comparativo es grande . En casa de tu papá se quedaban hasta el 3 de enero.

En fin. No pararía de describir afrentas y lágrimas derramadas

Lo que pienso en este momento es ¿y que tal que a mi me de un resfriadito  y me muera de un día para el otro? ¿como te quedarías tu?

Es posible que me digas que feliz y descuidada, pero con el tiempo se calma la actividad relacionada con el funeral  y te quedas tu a solas con tus pensamientos y sentimientos .

Quiero decirte, que aunque estamos de pelea desde que quise ir al cumple de los niños...."


Aquí se interrumpe la carta...


Te juro, canalla, que si yo hubiese conocido la mitad de las bestialidades que yo ahora sé que hiciste a tu madre, te habría arrancado la cabeza sin dudarlo, monstruo inmundo









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