.png)
Otra evidencia más de que Colombia es un país de pandereta en todos los sentidos
Hace unas semanas solicité ante la Registraduría, organismo equivalente en España al Registro Civil Central, la impugnación del documento de inscripción de defunción de mi esposa en Notaría 71, por varios motivos simultáneos:
1) Según la ley colombiana este documento debe cumplir seis disposiciones legales para ser válido, entre ellas, la presentación de la cédula original de la difunta. No cumplió ninguna
2) La titular de la Notaria 71 fue demandada por este mismo organismo por considerarla incapaz para ejercer dicho cargo, procediéndose a denunciarla por la via penal, en un juicio que ella perdió y del que tengo completas las conclusiones del juez. Hoy sigue actuando como notaria con toda normalidad
3) La inscripción de la defunción hacía referencia al certificado de defunción de mi esposa, que fue firmado presuntamente por una doctora llamada Yneth Milena López, que en ese momento se encontraba de vacaciones en Santa Marta, lo que convierte el documento en nulo y fraudulento
4) En agosto de 2020 presenté una denuncia ante fiscalía por un delito de homicidio contra mis ex hijastros, los criminales Durán Peña, cometido en la persona de mi esposa. La respuesta de la policía (por un amigo personal de mi ex hijastra) fue NEGAR que mi esposa estuviese muerta y pedir a la Fiscalía protección policial para ella ya que yo supuestamente la estaba "amenazando en su vida y en su integridad", es decir, ESTANDO VIVA quince meses después de muerta. Esta respuesta, fue dada por válida por la Fiscalía pese a la existencia justamente de este documento de inscripción de defunción. Abiertamente pregunte a la Registraduría como es posible que una persona pudiera estar legalmente viva en noviembre 20 y al mismo tiempo haber muerto en agosto 19. Para la Registraduría este evidente disparate no merece duda ni objeción alguna
Esto es Colombia
Un país de chiste donde la justicia es inexistente
.jpeg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario