Durante abril 17 Susana mantuvo una espiral de actividad aparentemente cada vez más vertiginosa. De todas formas, ya habían elementos en el horizonte que apuntaban a problemas:
El volumen de gasto por todas esas salidas empezaba a ser considerable e inquietante.
Por otro lado, Susana empieza a acudir a reuniones de Alcohólicos Anónimos, con el embarazo para ella que le suponía reconocerme -nunca lo hizo- que especialmente en el período 1988-1993 había tenido graves problemas en ese sentido, que yo descubrí gracias a borradores de cartas a su madre en los que reconocía que ya había superado esta clase de problemas con el alcohol y con cosas peores
En este momento también empiezan a producirse dos problemas simultáneos. Pequeños olvidos y desorientaciones, que yo siempre le decía que eran normales y fruto en el peor de los casos de un efecto secundario de la operación, pero que "alguien" le insinuaba que podia significar que el tumor había regresado.
Por otro lado, eL tratamiento seguía produciéndose, y el tumor no daba señales de desaparición, lo cual era sumamente inquietante. La doctora, ignoro el motivo, empezó a insinuar la posibilidad de interrumpir el tratamiento para "ver que pasa", aunque yo sospechaba que lo que eso escondía era tratar de encontrar una manera de reducir el astronómico coste del mismo
En este mes, además tuvimos una conversación bastante franca con ella (por supuesto, la familia indiferente a todo lo que fuera relacionado con su enfermedad). En ella, me reconoció que el tratamiento esperaban que funcionase sólo hasta noviembre 16, pero, y la cito textualmente, "no esperábamos que acabase el verano".Aparentemente eso mostraba una expectativa inquietante respecto del tumor, que seguía visible, aunque menor de un centímetro , seguía siendo una amenaza.
Los pinchazos sucesivos seguían siendo cada vez más difíciles. Curiosamente es muy probable que esa problemática en las venas estuviese detrás de la obstrucción venosa, que se produjo en agosto 19 en Colombia, que desembocó en una trombosis que precipitó un accidente cerebro vascular que le costó la vida. Si la familia se hubiese preocupado mínimamente de ella esto seguramente se hubiese evitado
La dinámica de salidas una detrás de otra por ejemplo nos llevó al Liceo, a ver en la platea un pintoresco espectáculo de danza china llamado Shen Yun, algo sumamente curioso y extraño, la verdad
Desayunos siempre en Xocoa, en nuestro espacio, que casi nos lo reservaban todas las mañanas
Los efectos del tratamiento empezaban a dejar huella en sus articulaciones y en sus huesos y necesitó hacer unas clases en el Clínic para facilitar un alivio a esas molestias., También empezó a acusar efectos digestivos y también trastornos del sueño, ya que los dos o tres días posteriores al tratamiento los pasaba pasando la noche en vela
Para tratar de dormir mejor, fuimos a finales de mes a Carrefour, a comprar juegos de sábanas (que en agosto 19 acabaron en Colombia, en un robo tan insólito como surrealista) y un colchón nuevo, que es el que yo aún tengo
El 23 de abril se produjo un inesperado cambio de planes. Susana aceptó mostrar a su sobrina Juanita todo lo que ocurría en las calles de la ciudad ese día. Coincidió con la llegada de su pareja, que al parecer trabajaba (?) en Holanda.
Para Susana, la relación con su sobrina era sumamente equívoca. Para ella era una oportunidad de conseguir una relación sana con alguien de su familia, algo que con sus hermanos era sencillamente inviable. Juanita llegó en diciembre 16, aparentemente para realizar una especie de maestría en la Universidad de Girona, pero por las noticias que recibíamos de ella, era en realidad unas vacaciones pagadas por papá en Europa, que aceleraron su componente festivo cuando apareció su hermana a principios de abril y después su citada pareja. Prácticamente no la vió salvo en contadísimas ocasiones, y una de ellas fue esta, el día de Sant Jordi, algo que a mí, porque no reconocerlo no me causó un especial entusiasmo, ya que suponía mezclar ese día con los problemas relacionales que tenía Susana con su familia
A Susana también le impactó notablemente que Juanita no parecía tener el más mínimo interés por invitarla a su boda, pese a que ya se había gastado de forma un poco exagerada cientos de euros al respecto, para mi desconcierto. De hecho, en abril se gastó 200 euros en un abrigo para esa boda, y la sorprendí a tiempo tratando de pagar casi 300 euros en un regalo, un elefante hecho a base de "trencadís" -horrible por cierto- que pude convencerla que no lo pagase
Esta foto me pareció muy interesante. Susana no sonríe Está cansada y creo que intuye un futuro incierto. Preocupaba
Y aquí, ja ja ja, je je je.
Y mientras tanto, yo no dejaba de multiplicarme. Al día siguiente con mi madre, celebrando el que sería su último cumpleaños,el 89. En ese momento su salud estaba flaqueando de manera inquietante. Su oido, por las largas horas escuchando la radio, flaqueaba. La vista también, y lo que era peor, el hígado ya fallaba, la función digestiva también y la renal estaba cerca del colapso. Ni que decir tiene que la preocupación en mi caso era cada vez más creciente.
La familia de Susana, insisto una vez más, completamente indiferente, como de costumbre
A finales de abril, las noticias parecen indicar un empeoramiento del tumor, Susana queda desconcertada ante ello, y como siempre sucedía en estos casos, respondía haciendo cosas como mínimo extrañas. Fuimos hasta una tienda de colchones de Urgell Sepúlveda, y al lado quiso gastar casi 50 euros en una lámpara bastante pesada que simulaba ser un bloque de sal.
A su problema de salud, le añadía la preocupación por mi madre y sus gastos excesivos y raros como este
Y además, en las dos casas contiguas, no sólo estaban haciendo obras simultáneas sino un ruido clamoroso desde primeras horas de la mañana.
Cuando Susana a mediodía se quería tomar unos minutos para hacer una siesta, simultáneamente empezaba también el ruido de forma espectacular
14 de mayo 17. Una de las últimas idas al cine Comedia. El cansancio y la fatiga eran tangibles pero no dejaba de querer desconectar en el cine.
Todo eso eran los días previos a otro de sus absurdos viajes a Colombia, el cual iba a ser uno de los más graves de todos
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